Se debe planificar la piscina pensando en los gustos y aficiones de toda la familia.
El diseño de una piscina se basa en las actividades que en ella se quiera realizar, tanto en el presente como en el futuro. El concepto de piscina como un espacio reservado a la natación deportiva ha sido desechado por la idea más real de “piscina lúdica“. Es decir, una zona acuática reservada al baño, al descanso y a la relajación donde la natación es simplemente una actividad más.
Este tipo de piscina permite unas formas más libres y artísticas y se puede adornar con rocas naturales o artificiales, cascadas, jardineras…
El número de usuarios no es determinante, pero en el caso de familias con hijos, se debe tener en cuenta la edad de éstos, que seguramente invitarán a sus amigos, y que, con los años, variarán sus costumbres. Lo ideal en este caso es diseñar la piscina para toda la familia y para todas las edades.